Si crees que tu amigo tiene una sobredosis
llama al 911 de inmediato.
La ley del Buen Samaritano del estado de Washington los protege a ambos de ser acusados por posesión de drogas.
La mayoría de los adolescentes dicen que confían en sus padres o cuidadores más que en nadie cuando se trata de información y consejos sobre las drogas. Empieza a hablarles hoy mismo. Porque para ellos, tú eres la persona experta.
¿Por qué? Puedes enterarte de lo que han escuchado y compartir lo que sabes.
¿Por qué?: Las noticias oportunas te permiten compartir información y hablar sobre cómo te sientes.
¿Por qué?: Puedes explicarle los riesgos reales de las pastillas falsas y establecer expectativas con tu hijo adolescente acerca de que sólo tome medicamentos que le hayan sido recetados y recogidos en una farmacia.
¿Por qué?: Puedes compartir información sobre los signos de una sobredosis, cómo utilizar la naloxona y cuándo llamar al 911.
¿Por qué? Los adolescentes necesitan saber que pueden acudir a ti si tienen preguntas y que estarás ahí para ayudarles.
La verdad es que la mayoría de los adolescentes no experimentan con pastillas de ningún tipo, así que está bien no probarlas. Las amistades se protegen mutuamente y no se presionan entre sí para tomar riesgos y poner sus vidas en peligro.